9 ago 2012

Averías y calor



Espejos del verano,
relatos de terror,
sueños con propano
en el ventilador. 

Una voz tras el cristal,
un corazón averiado.
Grita como un animal
mi televisor atormentado.

Como en el final triste
de una película antigua
nadie puede abrirse 
y no hay nadie que resista.

Mi apartamento se derrite
como un helado en el suelo.
La avería persiste
como el sabor del caramelo.

Cae el agua de mi ducha,
cae al suelo un sujetador.
Al vecino se le escucha
cantando roto de amor.

Es el calor, es la avería
como un hielo derretido.
El verano y la alegría
no son hoy muy divertidos.

Y tu voz tras el cristal
llega al son del crepúsculo
cuando muere mi animal
en este sueño minúsculo...

Y ya no puede, no sabe respirar.